sábado, 7 de diciembre de 2013

Palacio Real de La Granja de San Ildefonso

Situado en la provincia de Segovia, en la zona norte de la Sierra de Guadarrama y a unos 11 km de la capital de la provincia segoviana, se encuentra el municipio del Real Sitio de La Granja de San Ildefonso.
El monumento más emblemático y por lo que es conocida esta localidad, es el Palacio Real, del que hoy vamos a hablar.

El nombre del municipio el cual da nombre también al propio palacio, proviene de una antigua granja, que los monjes tenían en las inmediaciones.
Este palacio ha sido utilizado como la residencia de verano desde su construcción en tiempos de Felipe V hasta el reinado de Alfonso XIII (abuelo del actual, Juan Carlos I). Es una de las residencias pertenecientes a la actual Familia Real Española, por lo que está gestionado por Patrimonio Nacional para que el público pueda disfrutar del palacio.

La historia del Palacio Real de La Granja de San Ildefonso se remonta al siglo XVIII, cuando empieza a gobernar en España la dinastía de los Borbones.
Felipe de Borbón nacido en Versalles (hijo del Gran Delfín de Francia y nieto del famoso rey Luis XIV apodado el Rey Sol), es proclamado Rey al morir su antecesor Carlos II de Austria (su tío-abuelo) sin descendencia y tras la Guerra de la Sucesión, termina la dinastía de los Austrias y comienza a ejercer el poder la de los Borbones; de este modo Felipe se convierte en el primer Rey de la dinastía en el Imperio Español como Felipe V.

Durante su reinado el Monarca queda fascinado por la zona y los paisajes de San Ildefonso, es cuando decide levantar un nuevo gran palacio, para lo cual compra los terrenos de la antigua granja que poseían los monjes. Debido a que el Rey fue criado y educado en Francia, quiso imitar el modelo francés del Palacio de Versalles, por lo que el Palacio de la Granja es una copia del mismo.
Este palacio es de estilo Barroco y desde 1724 cuando se terminó de construir pasó a ser residencia de verano del Rey de España, lo cual ha perdurado por todos sus sucesores hasta tiempos de Alfonso XIII.

Entre sus dependencias destaca la capilla a la que el Rey acudía que es la Colegiata de la Santísima Trinidad, la cual se encuentra anexionada a la parte trasera del palacio y en su interior se encuentra una capilla donde están enterrados el propio Felipe V y su segunda esposa Isabel de Farmesio.
En el interior del palacio destacan también la colección de tapices y los frescos de sus techos.



En cuanto a sus amplios jardines con 146 hectáreas, imitan también el estilo francés, de hecho fueron diseñados por el mismo creador que los de Versalles.
Destacan las esculturas de personajes de la mitología clásica, colocadas en las múltiples fuentes que hay en los jardines; estas figuras se quisieron hacer en un principio de bronce pero debido a la crisis del momento, se tuvieron que realizar en plomo y pintar después para que parecieran bronce. El agua de las fuentes proviene de un estanque llamado "El Mar" que está situado en la parte alta de los jardines.
Si vas a visitarlo, debes de saber que las fuentes solo están en funcionamiento todas a la vez tres veces al año, pues cuando se diseñaron se pensó en encenderlas únicamente cuando el Rey estuviera presente, por lo que no están pensadas para que estén en continuo funcionamiento y además supondría un importante deterioro debido a su alto consumo.




Si queréis más información acerca de horarios, tarifas, así como de otra información útil para poderlo visitar; podéis acceder a este enlace que os dejo de la propia página de Patrimonio Nacional.
http://www.patrimonionacional.es/Home/Palacios-Reales/Palacio-Real-de-La-Granja-de-San-Ildefonso.aspx



*Cuando tuve la oportunidad de viajar a este lugar fue en invierno, por lo que en las fotos el agua de las fuentes aparece helada, no os parezca raro.

3 comentarios:

  1. Espero poder visitar pronto La Granja...

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  2. Casualmente he tenido la oportunidad de visitarlas este puente, y la verdad que en invierno dejan mucho que desear, pero en verano volveré porque tiene que ser digno de presenciar.
    Enhorabuena por el reportaje.

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  3. Si la verdad, es que ya se sabe que en invierno la naturaleza está más triste. Pero en verano o primavera con el buen tiempo, los jardines tienen que estar preciosos y con las fuentes en funcionamiento aún más, lo malo es que solo funcionan a la vez tres veces al año y hay que elegir bien el día si se quiere ver. Y gracias por la enhorabuena.

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